domingo, 21 de junio de 2009

Hoy, no es un buen día

Justo cuando vuelves a sentirte seguro la tierra de debajo de tus pies se desplaza y caes al suelo y con suerte podrás curarte las heridas, pero algunas heridas son más profundas de lo que parecen y requieren más cuidados. Algunas heridas hay que quitarle la tirita y dejar que respiren y esperar a que se curen...

Casi todas las heridas son más profundas de lo que pensamos, no se ven a primera vista. Y luego están las heridas que nos cogen por sorpresa. El truco está en hurgar en las heridas hasta encontrar la verdadera causa del dolor, y cuando la encuentras hay que dejarse la piel hasta curarla.




[Anatomía de Grey]

4 comentarios:

  1. hola ¡¡¡ bonito blog, y titulo y todo¡¡¡


    Descubri tu blog por casualidad, si quieres pasarte por el mio a escuchar mi programa de radio te estare agradecido:
    republica libertaria de las tortugas

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  2. Hola, mi niña, ¡cuanto tiempo sin saber de ti!

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  3. que duro!!!! esty deacuerdo, pero me duele tanto hurgarme las heridas que casi nunca suelo hacerlo, suelo dejar que el tiempo las sane...

    Bessitos desde la borágine del proceso de oposición :(

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  4. Hola guapa, me ha gustado este post... Yo siempre me hurgo y me hurgo, quizás demasiado, pero bueno aunq no lo creas tus heridas ya han empezado a cicatrizar, ese es un proceso tampoco se ve, pero sin duda, ya ha empezado. Mucho ánimo, muchos besos y adelante http://curandoelcorazon.blogia.com/

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